jueves. 09.05.2024
El Índice económico del Cercle d'Economia de Mallorca muestra como la actividad económica sigue fuerte, registrando crecimiento el 85% de los indicadores disponibles.

 

Sin embargo, los indicadores que se aceleran siguen perdiendo impulso en junio (51% frente al 61% del mes de mayo). De acuerdo con esta tendencia, todo apunta que durante el mes de julio la economía de las Islas Baleares ha entrado en fase de desaceleración.

De este modo, la coyuntura económica balear presenta un escenario de crecimiento intenso, pero se espera que este incremento sea cada vez menor.

Según el informe,  el índice compuesto de los gestores de compras (PMI), en la mayoría de países europeos, ya está por debajo del 50%, y anticipan un deterioro de la actividad y de las expectativas empresariales.

La explosión de la inflación, muy intensa y más persistente de la prevista por los analistas, ha provocado que los costes empresariales aumenten y que la capacidad adquisitiva de los ciudadanos mengüe significativamente.

Esto ha obligado a actuar a los bancos centrales, dejando de lado la política extraordinariamente expansiva y empezando a subir los tipos de interés. Desde hace un año y desde estas notas de coyuntura, se había ido alertando del elevado endeudamiento público que, combinado con el aumento de tipos de interés, sin duda acabará siendo un lastre para el crecimiento a medio y a largo plazo.

Así, lo más probable es que los ciudadanos de los países emisores de turismo hacia las Islas, como Alemania o Reino Unido, sufran una bajada en la capacidad de compra, lo que incidirá de manera directa en la evolución de la actividad económica en Baleares de cara especialmente a 2023.

La economía de Baleares empieza a frenarse, según el Cercle d'Economia