Ferrocarril de Sóller rindió ayer homenaje a siete de sus trabajadores que se han jubilado en los dos últimos años. Durante el homenaje, el presidente de la compañía, Óscar Mayol, les hizo entrega de una placa conmemorativa y les agradeció sus servicios prestados durante "casi toda una vida".
Mayol manifestó también el "orgullo para nuestra empresa de haber contado con tan magníficas personas y excelentes trabajadores".
Los homenajeados fueron Joan Marroig, José Miguel García, Jaime Alcover, Gregori Reynés, Jaime Deyá, José Lorente y José Ponce.
Joan Marroig entró a trabajar en Ferrocarril de Sóller en 1986, fue conductor de tren y luego ha estado en el taller mecánico; José Miguel García ha sido vigilante nocturno desde el año 1976; Jaime Alcover, trabajador en la empresa desde el año 1980, estuvo en talleres y también ha sido el jefe de ingeniería; Gregori Reynés ha trabajado desde 1987 en el taller de carpintería; Jaime Deyá entró en la empresa en el año 1983, estuvo primero trabajando en vías y obras y años más tarde ha sido conductor de tranvía; José Lorente empezó a trabajar en el año 1979 en el tranvía y luego ha sido conductor del tren. Y José Poncé, el más veterano, ha sido electricista en la empresa desde el año 1969.
Cabe destacar que Ferrocarril de Sóller cuenta durante todo el año con una plantilla de unos 90 trabajadores y en verano se amplía a 110.
