viernes. 29.03.2024

Preguntas y respuestas sobre la Ley del Turismo y alquiler turístico

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¿Regular equivale a legalizar el alquiler turístico?

No. No es lo mismo "regularizar" (legalizar) que "regular": regular consiste en establecer condiciones para la explotación y comercialización de uno de los sectores incipientes del negocio turístico como representa el alquiler turístico.

 

¿Por qué regular el alquiler turístico si ya estaba regulado?

La Ley 4/2012 o "Ley Delgado" sólo regulaba la comercialización de estancias turísticas de alquiler en edificios unifamiliares. Las leyes deben servir para afrontar la realidad, y hoy en día se están comercializando entre 60.000 y 100.000 plazas de alquiler al margen de la norma, tanto en edificaciones unifamiliares como plurifamiliares.

 

¿Es cierto que afectará a lo que ya estaba regulado y era legal?

No. La nueva Ley NO afecta a los alquileres turísticos que ya se habían dado de alta en base a la Ley 4/2012.

 

¿Esta regulación favorece los intereses de los hoteleros o los perjudica?

La regulación del alquiler turístico favorece ante todo a la ciudadanía. La patronal hotelera aboga por prohibir el alquiler turístico en plurifamiliares, que es evidente que no es una solución, ya que considera a este segmento como competencia. Aparte de la regulación del alquiler, la nueva Ley acaba con las excepciones en la normativa que habían amparado el crecimiento de plazas hoteleras de los últimos años.

 

¿Qué tiene que ver esta regulación con el denominado "cambio del modelo turístico"?

Se regula una actividad incipiente del negocio turístico para garantizar el bien común frente a la especulación. Junto con el impuesto de turismo sostenible y el establecimiento de un "techo de plazas" de alojamiento tanto para plazas de alquiler como hoteleras a partir de la bolsa de plazas disponibles que hasta ahora servía para legalizar plazas de establecimientos hoteleros (en el caso de Mallorca es de unas 45.000), esta regulación permite avanzar hacia un modelo turístico que transforme progresivamente los récords de turistas en mejoras sociales y medioambientales.

 

¿Por qué se ponen tantos requisitos al negocio del alquiler turístico?

Los gobiernos deben dar facilidades a la actividad económica, pero también poner condiciones que garanticen la prosperidad compartida y en nuestro caso, un modelo turístico que tienda a la sostenibilidad y a la calidad. No se puede hablar de turismo de calidad y dejar que se comercialice cualquier cosa y de cualquier manera. Al mismo tiempo, esas condiciones deben contener aspectos sociales, medioambientales y de calidad del servicio que se ofrece, y eso es lo que hace la Ley.

 

¿Regular los pisos turísticos no favorece un crecimiento insostenible?

Si se pudiera alquilar cualquier piso como servicio turístico, sí. Por eso en este aspecto la norma es restrictiva, porque hay que garantizar tanto el derecho a la vivienda como la convivencia entre turistas y residentes. Ayuntamientos y Consells insulars, además, deberán zonificar e indicar dónde se pueden alquilar plurifamiliares y dónde no, en el mismo sentido. En Eivissa, por ejemplo, no se podrán alquilar pisos turísticos como exigen las instituciones locales, pero además las instituciones locales dispondrán de herramientas normativas y de un régimen sancionador para perseguir el alquiler ilegal.

 

¿Qué tiene que ver el acceso a la vivienda con el alquiler turístico?

Mucho: al ser una sociedad turística, la presión del turismo ya no sólo sobre el territorio sino sobre las plazas residenciales a raíz del nuevo fenómeno del alquiler ocasiona un incremento de los precios de las viviendas que en este momento ya afecta a residentes que no pueden asumir los precios del alquiler en determinadas zonas, como el caso citado de Eivissa. En paralelo a la Ley del Turismo el Govern también impulsará una Ley de la Vivienda que sea complementaria de ésta y garantice el derecho de acceso a una vivienda digna por delante de las posibilidades de negocio. Por esta misma razón la Ley prohíbe directamente el alquiler turístico en viviendas de protección oficial o de promoción pública.

 

¿Puede un gobierno regional establecer condiciones para operadores globales como las plataformas digitales que comercializan hoy en día el alquiler turístico?

Puede y debe hacerlo, en tanto que la actividad de estos operadores (tipo AirBnB) se desarrolle en el ámbito territorial de las Illes Balears y además lo hacen en un sector económico estratégico que además genera impactos sociales y medioambientales, no todos ellos positivos. Estos operadores son junto con los propietarios un actor clave en el desarrollo exponencial en estos últimos años del alquiler turístico, y por tanto se les exigirá que sólo puedan comercializar establecimientos dados de alta de acuerdo con las condiciones marcadas por la Ley.

 

¿Acabará esta regulación con los problemas asociados al alquiler turístico?

Esta regulación es un instrumento más, que viene a regular el alquiler turístico como actividad que hoy es mayoritariamente ilegal (en negro) o alegal (acogida a la Ley de Arrendamientos Urbanos pero no acorde a los estándares que hay que exigir a un negocio turístico). Además, lo hace pensando en el bien común, en el derecho a la vivienda y en un turismo que tienda a la calidad y a la sostenibilidad. Otros destinos turísticos como Barcelona, París o Nueva York tienen serios problemas con el alquiler turístico a pesar de tenerlo regulado, ya que se trata de una cuestión compleja, global y con intereses antagónicos. Al menos en nuestro caso, los impulsores de la regulación tenemos claro hacia dónde queremos ir.

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