Cada vez está más complicado el acceso a la vivienda en España y Baleares no es una excepción. A pesar de la recuperación económica y del incremento de los ingresos familiares cada vez sale más caro comprar un piso o alquilarlo en relación al dinero que entra en el núcleo familiar.
Según un estudio realizado por pisos.com los ciudadanos de las Islas tienen que destinar un 27,16% de su sueldo a la compra del piso con una hipoteca que, de media sale por unos 698 euros.
En el caso del alquiler la situación es aún peor. El mismo estudio refleja que si se alquila el dinero que se invierte llega al 33,64% de los recursos familiares o lo que es lo mismo hasta a 865 euros, ni más ni menos. La elevada demanda interna, la falta de oferta y la influencia del turismo vacacional han colaborado a disparar los alquileres.
Estos datos situan a Baleares entre las comunidades más caras y donde mayor esfuerzo económico tienen que realizar las familias para disponer de una vivienda en cualquiera de las dos opciones; compra o alquiler. Sólo Madrid y Pais Vasco superan a las Islas. De hecho en Madrid se llega a destinar un 41% de los recursos al alquiler y en Euskadi casi un 36%.
Aunque los ingresos medios anuales de los hogares españoles se han incrementado un 2,4%, hasta los 26.730 euros1, acceder a una vivienda es más complicado que hace un año: hacer frente a este gasto requiere ahora un 0,51% más del presupuesto familiar, el 25,86% del total.
El principal responsable de ello es el aumento de las rentas de alquiler de 652 a 675 euros mensuales2, ya que el precio de venta por metro cuadrado ha descendido de 1.552 a 1.526 euros3 desde el último análisis de la Encuesta de Condiciones de Vida del Instituto Nacional de Estadística realizado por pisos.com.
El director general de pisos.com, Miguel Ángel Alemany, señala que “aunque los ingresos medios mensuales por hogar han crecido, el aumento del precio del alquiler ha provocado que el acceso a la vivienda sea más costoso para los españoles, lo que disminuye su capacidad de gasto”.
No obstante, y tal y como recuerda el responsable del portal inmobiliario, los dos principales métodos de acceso a la vivienda guardan una diferencia fundamental: “Aunque la hipoteca suponga un gasto mensual más reducido, no debemos perder de vista el ahorro previo que exige convertirse en propietario. Además, el perfil crediticio requerido a un inquilino siempre será más laxo que el que debe cumplir un comprador”.
