jueves. 28.03.2024

España se sigue tiñendo de blanco. Ni la crisis ni la modernidad han podido acabar con el matrimonio y los españoles continúan casándose, sobre todo en septiembre, julio y junio. Durante el primer semestre del pasado año se celebraron más de 68 mil matrimonios en España y, a falta de conocer las estadísticas del segundo semestre de 2016, lo más probable es que el número de parejas que se dieron el sí, quiero superase las 150 mil, siguiendo con la tendencia de los últimos años recogida por el INE.

 

Una tendencia que, no obstante, ha ido a la baja durante las últimas décadas: mientras que en el año 1976 casi 261 mil parejas se unieron en matrimonio, la cifra ha ido cayendo hasta estabilizarse alrededor de las 160 mil uniones anuales.

 

Para la mayoría, casarse es añadir un capítulo más a su historia de amor. Un paso que puede salir muy caro. El coste medio de una boda en España es de 20.000 euros, según El libro imprescindible de las bodas del profesor Carles Torrecilla publicado por Bodas.net.

 

Los precios varían considerablemente entre comunidades autónomas. “En  el  norte  de  España  el  coste  por  invitado es más alto, pero no el número de invitados”, señalan en el citado estudio.

 

La cantidad de invitados influye en el coste final del enlace. En España la media ronda los 130 asistentes, aunque hay diferencias significativas por territorios: en las Islas Baleares parecen preferir las ceremonias en petit comité, con una media de 88 comensales, la más baja de España, mientras que en Murcia los invitados ascienden hasta los 183.

 

En cuanto al coste medio por invitado, la otra variable que afecta a la factura final, los navarros son los que más miman a sus comensales (223,5 euros por cabeza de media) frente a los andaluces, que son los más contenidos (105,5 euros por persona).

 

Por coste total, Canarias es la que registra las bodas más baratas, con una factura final de 12.473 euros, mientras que Castilla-La Mancha, que tras Murcia es la que celebra las bodas más populosas, es la que más gasta, con un coste total de 35.537,7 euros. En Madrid el coste final se sitúa por encima de la media (22.768,1 euros) y en Cataluña, por debajo (17.911 euros), aunque los madrileños invitan, de media a 38 personas más que los catalanes.

 

Parejas con una edad media de 30 años y sin hijos (solo una de cada cinco parejas tiene hijos previos al matrimonio). Así es el perfil medio de aquellos que deciden darse el sí, quiero, según el libro del profesor Torrecilla. Teniendo en cuenta que el salario medio mensual en España es de 1.636 euros brutos, a tenor del V Monitor anual Adecco sobre salarios de 2017,  y que la factura de una boda asciende de media a 20.000, una pareja necesitaría destinar el salario completo de seis meses para sufragar su boda.

 

A la hora de pasar por caja, los españoles prefieren pagar al contado. Son pocos los que deciden endeudarse, a pesar del coste final de la factura. Emma Nebot, responsable de protocolo del Grupo La Cartuja, explica al comparador HelpMyCash que “normalmente en nuestros salones los novios nos comentan que la mayoría de las veces suelen recurrir a la ayuda de familiares y a ahorros que han ido guardando en una cuenta durante algún tiempo”. Los datos del estudio de Bodas.net apuntan en la misma línea: “el pago  se  realiza  con ahorros,  el  dinero  de  los regalos y alguna ayuda de los padres, en este orden”.

 

La crisis ha cambiado los hábitos de los españoles, indica Nebot, y se ha notado especialmente en el número de comensales, que se ha reducido. “El truco más utilizado para abaratar el coste es el de casarse en fechas menos solicitadas como viernes, domingos y sábados en la temporada de invierno por las promociones y ofertas que se ofrecen, suponiendo un ahorro de hasta un 20 % en el precio del banquete”. 

 

Maquillaje, trajes o flores se llevan un buen pellizco del presupuesto. El servicio de floristería y la decoración suele costar entre 100 y 500 euros, el maquillaje y la peluquería sube de media unos 230 euros y el traje de la novia asciende hasta los 1.750 euros si se recurre a una firma especializada, según El libro imprescindible de las bodas. Espectáculos, joyería, sweet tables y otros tantos extras van incrementando la factura. 

 

Las ubicaciones preferidas para celebrar la boda son las fincas, los restaurantes, los hoteles y los salones de boda. “Según nuestras estadísticas [los novios] suelen dedicar un 85 % [del presupuesto del banquete] al menú y a la gastronomía, un 10 % a las discomóviles y a la barra libre y entre un 5 % y un 10 % a otros servicios adicionales (bufés, jamón viruteado, barras de bebidas premium, etc.)”, declaran desde el Grupo La Cartuja, que cuentan con dos complejos de celebración de bodas en Valencia.

 

Contar con un fotógrafo, incluso con un dron que grabe a vista de pájaro el enlace, es otro de los elementos casi imprescindibles de las bodas. Laura López, cofundadora de la productora Punto y Coma Films, señala que “lo habitual para tener unas fotos de calidad o de autor suele rondar entre los 1.000 o 1.500 euros, sin contar el IVA. Algunos fotógrafos incluyen el álbum en este precio y una sesión preboda para conocer a los novios, pero cada vez son más los que ofrecen el servicio de álbum por separado”.

 

Lo cierto es que, como en todos los sectores, el nupcial también se ha ido modernizando. Atrás quedaron los vídeos de larga duración que nuestros conocidos nos obligaban a ver en jornadas vespertinas maratonianas, ahora la tendencia está marcada por la originalidad y por los vídeos breves de unos 30 minutos. “Los vídeos de boda se han vuelto algo mucho más creativo, siendo más próximos a un videoclip o a un documental de autor”, afirman desde la productora.

El salario de seis meses para pagar la factura de la boda