El mundo del vino en Mallorca ha vivido un proceso de crecimiento espectacular en prácticamente una década. Una de las últimas incorporaciones empresariales al sector es la bodega Castell de Santueri ubicada en Felanitx. Su enólogo Jean Pierre Muna, nos explica las particularidades de este nuevo proyecto.
-¿Cómo definiría Castell de Santueri?
Es un proyecto pensado a partir de dos parcelas de viña de la zona de Felanitx situadas a una cierta altura con suelos de grava y arena. Lo que queremos es expresar a través las condiciones locales, el paisaje, el clima para conseguir vinos con identidad propia y sobre todo con elegancia.
En el mundo del vino existe mucha subjetividad y a cada persona le puede gustar un tipo de vino o un productor diferentes pero es muy complicado que un vino realmente elegante no guste a alguien.
-¿En Mallorca se ha vivido un boom del sector. Como lo analiza?
Hace diez años que vivo en la Isla y antes ya la conocía por que la visitaba para trabajar con bodegas. En un momento dado se vio que se consumía mucho vino de la Península y muchos se plantearon por que no se consumía más vino mallorquín si aquí había un mercado fuerte. A partir de aquí fueron surgiendo proyectos de bodegas pero en muchos casos se trata de una producción que copia lo que se hace en otros sitios. Por ejemplo en Mallorca no hay vinos de los que denominamos de ‘terroir’.
-¿Explíque este concepto?
Es algo tan simple como el hecho de dejar expresarse a la uva y al viñedo sin hacer4 demasiadas intervenciones humanas ni tecnología. Lo complicado realmente es simplificar los métodos.
-¿Aspiran a tener una gran producción?
Nuestra intención es conseguir unas 20.000 botellas pero no ir más allá. Lo importante es lograr el concepto de elegancia que buscamos.
-¿Dirigirán su producción a Mallorca o a la exportación?
Nuestra prioridad con estas cantidades tan reducidas es venderlo todo en Mallorca sin renunciar a exportar alguna cantidad. Afortunadamente los mallorquines piensan que su producto es lo primero y lo defienden y consumen. Es verdad que la exportación crece en muchas bodegas pero se trata sobre todo de las grandes en tamaño que se ven obligadas a vender fuera para conseguir sacar toda su producción.
