El valor de la vivienda terminada, nueva y usada, se ha incrementado un 2,6% en Baleares y Canarias en julio, en comparación con el mismo mes del año pasado, según el índice IMIE de la tasadora Tinsa.
En lo que va de año, la vivienda se ha revalorizado un 4,7% en ambos archipiélagos, ha informado la tasadora en un comunicado.
En España, el índice IMIE General y Grandes Mercados (que se calcula a partir de las tasaciones de vivienda realizadas por la compañía y recoge cada mes la variación interanual del valor del m² de un inmueble y su nivel respecto al año 2001) se situó en julio en 1.389 puntos, lo que supone un incremento del 3,7 % respecto a julio de 2016, y que regresa al nivel de diciembre de 2013.
POR ZONAS. Las capitales y grandes ciudades, con una subida del 6,4% en el último año, y la costa mediterránea, con un 3,3%, han sido las zonas que más han aumentado sus precios en tasa interanual. Desde máximos de 2007, la vivienda ha perdido de media un 39,2% de su valor.
El director del Servicio de Estudios de Tinsa, Jorge Ripoll, ha explicado que "las ciudades de Madrid y Barcelona y las zonas de costa más tradicionales están polarizando la recuperación".
Todas las zonas analizadas incrementan su precio medio en tasa interanual por primera vez desde noviembre de 2015. En las áreas metropolitanas ha aumentado un 2% y en el resto de municipios (las poblaciones más pequeñas), se mantiene prácticamente plano con un mínimo repunte del 0,8% en tasa interanual.
La costa mediterránea y las capitales y grandes ciudades están destacando por su gran dinamismo desde el comienzo de este año, con un incremento de su valor medio de un 5,8% y un 5,5%, respectivamente.
El resto de zonas también se sitúan en positivo: las islas Baleares y Canarias se han revalorizado un 4,7% en los siete primeros meses de 2017, mientras que han subido ligeramente las áreas metropolitanas, un 1,7% y también el resto de municipios con un 0,3%.
En cuanto al ajuste del 39,2% desde los máximos cosechados en 2007, la zona donde se ha vivido el ajuste más duro desde el estallido de la crisis es la costa mediterránea, con una caída del 45,8%, seguida cada vez más de cerca por las áreas metropolitanas, con un descenso del 43,8%.
Por su parte, las capitales y grandes ciudades van reduciendo poco a poco la brecha desde máximos y se sitúan con un ajuste del 41%. En el otro extremo, las islas y las poblaciones más pequeñas, el resto de municipios, son las zonas en las que menos se ha reducido el valor medio de la vivienda con un descenso del 27,4% (en Baleares y Canarias) y del 36,8%, respectivamente.
