martes. 16.04.2024

El Banco Popular tenía un agujero de entre 11.800 millones de euros en el mejor escenario y 20.600 millones en el peor, antes de su resolución y venta al banco Santander, según revelan partes del informe de valoración de la entidad hecho por la consultora Deloitte.


La Junta Única de Resolución (JUR), el organismo europeo que decretó la resolución del banco el 7 de junio, publicó este viernes las versiones confidenciales -tras eliminar las partes sensibles- de este documento, de su propio informe de valoración, el plan de resolución que elaboró en 2016, las cartas que se enviaron a los potenciales compradores, y una versión más amplia de la decisión de resolución publicada en junio.



Según el informe de Deloitte, cuyo objetivo era estimar el valor que podría haber ofrecido un potencial comprador por el banco, la mejor estimación del ajuste de valoración de la entidad era de 14.700 millones de euros.



El agujero, según esta estimación final, se debería a un déficit de provisiones de 3.500 millones de euros en créditos, de 3.100 millones en activos fiscales diferidos, de 2.700 millones por activos intangibles y de 500 millones por capital e ingresos fijos.



La JUR ha oscurecido los agujeros ligados a las obligaciones legales, así como a subsidiarias y empresas conjuntas, que haciendo el cálculo supondrían en conjunto otros 2.700 millones.



Como resultado, Deloitte otorgó a la entidad una valoración en el rango de entre 1.300 millones en el mejor escenario y 8.200 millones negativos en el peor.



Su mejor estimación es que el banco tenía un valor negativo de 2.000 millones, por lo que el euro ofrecido por el Banco Santander -el único que presentó una oferta por la entidad- superaba esta cota y fue aceptada por la JUR.



Además, en cuanto al negocio inmobiliario del Popular, Deloitte apunta que el "valor justo estimado" de los activos adjudicados supondría una quita de entre el 42 % y el 47 % sobre las estimaciones hechas por la entidad española, lo que implica un agujero de entre 2.494 millones de euros y 3.192 millones.



En el caso de los activos tangibles, la quita era de entre el 15 % y el 27 %, entre 126 millones y 231 millones, frente a lo previsto por el Popular.



En cuanto a los créditos, donde el ratio de morosidad del banco a 31 de marzo -fecha de la que datan los datos utilizados por Deloitte para hacer el informe- era del 14,9 %, la consultora señaló que toda la cartera parecía "poco atractiva para muchos compradores potenciales".



Deloitte, que en todo el informe usa el nombre en clave Hippocrates para referirse al Banco Popular, también hizo una estimación de lo que habrían perdido y recuperado los inversores en caso de que el banco hubiese sido liquidado en lugar de resuelto, pero la JUR tachó esta información en la versión publicada hoy.



Esta información se incluirá en otro informe que está haciendo también Deloitte y que se publicará en los próximos meses.

El Banco Popular tenía un agujero de entre 11.800 y 20.600M€