viernes. 29.03.2024

¿Brecha salarial o brecha social?

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En materia informativa los temas van y vienen movidos unas veces por la actualidad y otras por accidentes o sucesos cotidianos. Me escapa en esta ocasión, la razón concreta, pero lo cierto es que llevamos unas semanas si no meses, hablando de una brecha, que parece cada vez mayor, abierta entre hombres y mujeres a la hora de cobrar sus salarios.



Han aparecido estudios por doquier que confirman lo que parecía algo evidente aunque no demasiado correcto políticamente. Y es que las mujeres cobran aún mucho menos que los hombres para trabajar. En una sociedad supuestamente avanzada como la nuestra esto no debería suceder. La equiparación salarial y laboral no puede atender a discriminaciones de sexo.



Ahora bien, centrémonos un poco. Brecha salarial no significa que una mujer cobre un 15, un 20 o un 30% menos que un hombre por realizar exactamente el mismo trabajo. Puede existir alguna excepción, no lo niego pero esto no es habitual y en una misma empresa no se puede legalmente hacer estas distinciones para un mismo puesto de trabajo.



La famosa brecha salarial se fundamenta en medias generales, en sectores pero también se basa sobre todo en hechos sociales. Es decir que pasamos a analizar una brecha social. ¿Qué quiero decir con esto? Pues para empezar que las mujeres lo tienen más complicado, mucho más complicado para acceder a puestos de elevada responsabilidad que, además implican una remuneración más elevada. Es cierto que empezamos a ver a Directoras Comerciales, a Consejeras Delegadas o a Presidentas de empresas pero esta no es la tónica.



También vivimos en un mercado laboral en el que aún muchos trabajos son para hombres y otros para mujeres. Legalmente no se puede hacer esta distinción pero socialmente se hace. Además, los puestos supuestamente masculinos suelen estar mejor pagados que los femeninos.


Pero podemos entrar en temas más pantanosos si mezclamos la famosa conciliación familiar. Cuando sale a la palestra este concepto normalmente afecta a mujeres por que aún son ellas las que llevan las riendas de la familia. Son las que suelen renunciar muchas veces a una vida profesional plena ya posibles ascensos cuando se trata de cuidar a los hijos o mayores. Demasiados pocos son los casos en los que el hombre pide reducción de jornada o cambia de trabajo para hacerse cargo de estas responsabilidades.



Y hoy me quedo aquí. Reitero pués que los medios de comunicación, pero también la sociedad entera debería hablar de brecha social entre sexos. Sólo así, la igualdad será real dentro y fuera del ámbito laboral.

¿Brecha salarial o brecha social?