Más de 6.800 personas faltan a trabajar cada día sin baja médica en Baleares.En total, más de 23.400 personas no acuden diariamente a su puesto de trabajo en Baleares, lo que supone un coste anual de 1.192 millones de euros a las empresas de la región.
Estos son los datos que ha puesto de relieve el último informe sobre la materia elaborado por Randstad Research. En este estudio se indica que la tasa de absentismo sin baja médica en Baleares se sitúa en el 1,2%, mientras que a nivel nacional alcanza el 1,3%. En términos generales, la tasa de absentismo en Baleares alcanza el 4%, mientras que a nivel general se sitúa en el 4,3%.
A nivel nacional, más de 820.000 profesionales faltan diariamente a su puesto de trabajo, lo que deriva en un coste de más de 50.200 millones de euros para la empresas españolas.
Los sectores con mayor nivel de absentismo son las actividades de juegos de azar y apuestas (7,1%), asistencia en establecimientos residenciales (6,9%) y actividades de servicios sociales sin alojamiento (6,8%), mientras la media se sitúa en el 4,3%
Los sectores con menor nivel de absentismo son Actividades relacionadas con el empleo (2,1%), Edición (2,3%) y Telecomunicaciones (2,3%)
Entre las medidas que se pueden llevar a cabo para reducir el absentismo están la prevención de riesgos laborales, la conciliación laboral y familiar y la flexibilidad horaria consensuada entre empleador y empleado
. Se trata de un grave problema para las empresas españolas, ya que supone un impacto directo tanto en su productividad como en sus costes empresariales, lo que lastra su competitividad.
El análisis sectorial del absentismo pone de manifiesto que existe una gran dispersión respecto al absentismo, que a nivel nacional se sitúa en el entorno del 4,3%. De esta manera, el estudio de Randstad Research detecta algunos sectores donde las tasas de absentismo prácticamente duplican la tasa media, como es el caso de las ‘actividades de juegos de azar y apuestas’, donde supera el 7%. A continuación se sitúan ‘asistencia en establecimientos residenciales’, ‘actividades de servicios sociales sin alojamiento’ y ‘fabricación de vehículos de motor, remolques y semirremolques’, todas ellas con tasas por encima del 6,8%.
En el lado opuesto se encuentran otros sectores de actividad con tasas de absentismo laboral por debajo del 2,5%. El primer lugar lo ocupan las ‘actividades relacionadas con el empleo’, donde la tasa de absentismo se sitúa en el 2,1%, la mitad de la tasa nacional. A continuación se sitúan ‘edición’, ‘telecomunicaciones’, ‘industria del cuero y del calzado’ y ‘actividades jurídicas y de contabilidad’, todas ellas entre el 2,3% y el 2,5%.
Uno de los aspectos que más llama la atención es la diferencia en el absentismo laboral en función de la región en la que el profesional desarrolla su actividad. En este sentido, el estudio de Randstad Research revela que País Vasco, Castilla y León y Asturias son las regiones con mayores tasas de absentismo, todas ellas con índices cercanos al 5%. Los menores niveles se localizan en La Rioja, Castilla-La Mancha y Comunidad Valenciana, con tasas por debajo del 4%. Baleares, por su parte, se sitúa justo en el 4%.
Sin embargo, cuando se hace referencia al absentismo sin baja médica, estos ratios varían. En este caso, las regiones del norte de la península tienen tasas más elevadas que las del centro y sur. Castilla y León, País Vasco, Galicia y Cantabria registran los índices de absentismo más elevados, con tasas del 1,5% al 1,9%. Por su parte, Andalucía, Comunidad Valenciana, Madrid y Canarias se posicionan como las comunidades autónomas con menores índices de absentismo injustificado.
Randstad Research, además, ha cuantificado el coste para las empresas españolas del absentismo laboral, que cifra en 50.200 millones, un 4,5% del PIB nacional. En este caso, se tienen en cuenta diversos factores, como la pérdida de productividad y eficiencia, lo que reduce la competitividad de las empresas, el costes directo para la empresa (pago de la prestación y la cotización a la SS, contratación de sustitutos), y el coste de oportunidad en la producción de bienes y servicios.
