“La Unión Europa tendría que conseguir un divorcio amistoso con Reino Unido por el bien de la economía española ya que la posible imposición de aranceles perjudicaría enormemente al empresariado”, ha asegurado el economista Emilio Ontiveros en la conferencia que pronunció en las Primeras Jornadas de Auditoría de Baleares
Ontiveros ha señalado que el Brexit es uno de los factores de riesgo para España por cuanto “somos el único país, junto a Alemania, que tenemos superávit comercial con Reino Unido y porque el 23 por ciento de los ingresos por turismo en 2017 proceden de aquel país”. Además, los ciudadanos del Reino Unido son los “principales compradores foráneos de viviendas en España”.
La economía española, dijo, atraviesa un momento positivo con un crecimiento del 3 por ciento, por encima de la media de la eurozona, debido fundamentalmente al incremento de las exportaciones tanto en el número de empresarios que han decidido internacionalizarse, como por la diversidad geográfica y la oferta de bienes y servicios.
Otros factores que han favorecido esta situación tan buena han sido, según ha puntualizado, unos “tipos de interés cómodos, la contención de los precios de las materias primas, sobre todo de los hidrocarburos, y unos salarios bajos”. No obstante, el economista y presidente de Analistas Financieros Internacionales (AFI) predice un aumento del Euribor este año, con su presumible implicación para las hipotecas.
Aunque la economía española pueda transitar bien por 2018, Ontiveros ha advertido “ciertos nubarrones” “preocupantes” como el fin de la permisiva política monetaria del Banco Central Europeo; las posibles represalias que puedan adoptar China y la UE ante la penalización por parte de EEUU a las importaciones de aluminio y acero; y la convulsión que provocaría que ganasen en Italia partidos favorables a la salida del euro.
Emilio Ontiveros es partidario en este momento de dinamismo y competitividad de la economía española de incrementar los salarios y revalorizar las pensiones más bajas con el objetivo de garantizar su adecuación al poder adquisitivo.
En este último punto, ha recordado que hay que reforzar el mensaje a la sociedad de que “las pensiones no están amenazadas porque tienen una red de garantía que son los presupuestos generales de Estado”.
“El debate debería centrarse en discutir cómo se financian, entre cuyas medidas se podría contemplar subir las cotizaciones de las rentas más altas, y no en que se vayan o no a cobrar, que por supuesto está garantizado”, ha asegurado.
En el encuentro también han participado los directores financieros de los grupos empresariales Meliá Hotels International, Sampol Ingeniería y Obras y Distribuidora Rotger, Pilar Dols, Guillermo García Moliz y Francisco Muñoz de la Rosa, respectivamente.
Todos ellos han intervenido en una mesa redonda sobre los nuevos informes de Auditoría. Los cambios normativos han provocado que a partir de 2018 los informes de auditoría incluyan un análisis sobre las cuestiones de la empresa que le generan inquietud al auditor, es decir, dónde observa que haya riesgo de que los números contengan incorrecciones significativas (en la cifra de ingresos, en la falta de provisiones por riesgos fiscales, que las existencias estén sobrevaloradas…).
