viernes. 26.04.2024

La apuesta del Govern balear por la ley del cambio climático y la movilidad en coche eléctrico ha puesto en el objetivo a fabricantes y concesionarios de vehículos. Con Andrés Vidal presidente de Aseda, la asociación que agrupa a los concesionarios hemos analizado el presente del sector y las polémicas repercusiones que puede tener esta ley.


-¿En qué momento se encuentra el sector del automóvil?

-Entre 2008 y 2014 sufrimos y mucho el impacto de la crisis. Debemos tener en cuenta que nuestro sector es un termómetro muy bueno para sondear en que situación se encuentra la economía. Cuando las cosas van bien la gente cambia de coche más a menudo y cuando van mal alarga la vida útil de su vehículo y retrae el consumo.

Es cierto que hemos sido uno de los sectores en los que la mejora económica enseguida se ha traducido en mejora de ventas. Desde 2015 ya notamos esta majora y el pasado año ya llegamos a los que serían los volúmenes de ventas naturales.


No hemos vuelto a los números de ventas de antes de la crisis pero tampoco lo esperamos por que las ventas entonces el mercado estaba inflado por culpa de la burbuja en la que vivíamos.

 

"No hemos vuelto a las de ventas de antes de la crisis pero tampoco lo esperamos"

 

-¿Cómo se ha repartido esta mejora?¿Hay alguna gama que destaque actualmente?

-Cuando el mercado baja afecta a las ventas de todos los vehículos, tanto los de alta gama como los más modestos y cuando se recupera también.

Lo que si vemos actualmente es que el SUV y sobre todo el SUV compacto es la estrella en ventas. Todos los coches que lanzan las marcas en estos formatos son un éxito. Estas ventas se pueden deber en parte a una moda pero también a un concepto de practicidad. Son vehículos pequeños, de conducción alta y con buena visibilidad, bien equipados y estéticamente atractivos. Además, la oferta se ha multiplicado y el cliente tiene donde elegir.

 

-¿Cómo vé, de entrada la nueva ley de cambio climático del Govern que prevé frenar los nuevos coches diesel en siete años?

-Lo que se ha presentado es solo un borrador al que ya hemos presentado alegaciones. De entrada quiero recalcar que desde nuestra asociación compartimos el objetivo último de la ley que es cuidar nuestro entorno. Ahora bién pensamos que las fechas que se manejan son muy precipitadas. Hablamos de cambiar en siete años un modelo de movilidad que lleva implantado en nuestra sociedad desde hace mas de un siglo. Esto es muy difícil.


Creemos que es un error que en siete años no se permita circular a nuevos vehículos diesel pero que si continúen los antiguos. El Govern está regulando por tecnologías y propulsiones y tendría que hacerlo por emisiones. Es decir, saquemos de la carretera a los coches que más contaminan de verdad.

 

"Saquemos de la carretera a los coches que más contaminan"


-¿Cómo se puede hacer esto?

Pensando en incentivar el cambio y no en obsesionarse en prohibir. Por una parte se podrían aprobar planes de estímulo económico para retirar los coches antiguos que más contaminan. Por otro lado también se tendrían que estudiar medidas para cambiar estos viejos coches por otros nuevos menos contaminantes.


Es un gran error demonizar el vehículo diesel cuando con la tecnología actual ya se fabrican coches que emiten poca contaminación. Entiendo que hay una sensibilidad especial de los ciudadanos en contra de esta motorización por la contaminación pero es infundada.


-¿Está preparada la sociedad para esta revolución con el paso de la combustión al eléctrico?

-No estamos preparados y por diferentes motivos. Por una parte por que las autonomías de los vehículos eléctricos que hay en el mercado son insuficientes. Tampoco por que los precios de los eléctricos son muy elevados y por que no disponemos de las infraestructures de carga a gran escala necesarias para usar un eléctrico con normalidad.


Por este motivo lo que proponemos es aplicar la razón e ir incorporando estos vehículos de forma más escalonada. Creemos las infraestructuras, esperemos que el sector se desarrolle más y tengamos coches con autonomía mayor. El mercado por su propia inercia confluirá hacia el eléctrico.

 

"Es un gran error demonizar el vehículo diesel"


-¿Desde que se ha anunciado la nueva ley ha bajado la demanda de coches diesel?

-Hemos notado un trasvase de demanda hacia el vehículo de gasolina a pesar de que la contaminación de los modelos de gasolina y diesel es prácticamente la misma. Es cierto que existe una tendencia en los últimos años en este sentido pero el anuncio de la ley ha exagerado esta tendencia. En 2016 el 44% nuestras ventas fueron diesel, el año pasado se bajo al 40% y en este año en solo un trimestre ya hemos bajado al 30%.


-¿Trabajan ustedes con modelos eléctricos?

-Casi todos fabricantes tienen algún modelo eléctrico. Ningun fabricante se puede permitir el lujo de quedar descolgado de esta evolución. Ahora bién en estos momentos los fabricantes en cada vehículo eléctrico que venden pierden dinero. No es un producto rentable por que no existe volumen de ventas aún para que lo sea y las inversiones necesarias para desarrollar producto son muy elevadas.

 

"Los fabricantes pierden dinero en cada vehículo eléctrico que venden"


-¿Que consecuencias económicas tendrá este cambio para el sector?

-Es muy complicado anticipar que pasaré. Nosotros manejamos dos escenarios posibles. Por una parte puede pasar que la demanda de compra se traslade a los vehículos de gasolina i eléctricos si se prohíben los diesel. Otro posible escenario sería que la gente decidiese aguantar todo el tiempo posible con su coche diesel y alargarle la vida de forma que se reducirían de forma notable las ventas. Entonces obviamente nos veremos afectados y habrá ajustes de plantilla.


Es muy complicado que un coche eléctrico sea competitivo en precios a corto plazo. En estos momentos estos coches cuestan el doble que uno de gasolina y en siete años los precios de los eléctricos costarán aún bastante más que sus equivalentes en diesel o gasolina.


Pensemos además que los coches eléctricos tienen una vida útil mucho más corta. En siete u ocho años la vida de la batería se acaba y estamos hablando de la pieza más importante y cara del coche. Cambiarla cuesta mucho dinero en la actualidad.

Andrés Vidal: "Aún no estamos preparados para el paso al coche eléctrico"