viernes. 29.03.2024

 

Es capaz de explicar que su plato preferido para comer y para cocinar son los pies de cerdo incluso antes que un solomillo. No pasaría nada si estas palabras no viniesen de un reconocido chef, el primero mallorquín en obtener una estrella Michelín.

 

Este simple hecho denota una personalidad y una claridad de ideas que traslada a su cocina y a su equipo. Tomeu Caldentey es valiente en sus planteamientos, inquieto hasta el punto de defender su amor por dar prioridad a productos considerados como poco nobles en la cocina o a las verduras.

 

Amante del producto local por encima de todo relativiza absolutamente el hecho de conseguir una Estrella Michelín indicando que "no es un objetivo en si mismo sino que es un pistoletazo de salida para tus inquietudes". Tiene muy claro los costes de la alta gastronomía. "Un menú no cuesta 150 euros por que el negocio quiera tener más beneficio sino por que detrás de estos platos hay una estructura potente en personal y creatividad".

 

Como empresario reconoce que "vivimos en un país en el que habría más emprenedores si hubiera más facilitades para crear un negocio". Se queja, si, de la burocracia y de los impuestos que cree "inevitables puesto que forman parte de las reglas del juego".

 

A pesar de ello dice que "las dificultades para emprender son barreras que nos ponemos nosotros mismos. Buscamos excusas para no lanzarnos a la aventura por que una empresa supone también un riego personal".

 

Caldentey se lamenta también de que "vivimos en una sociedad en la que la paciencia es un valor del que se carece. Queremos resultados immediatos en casi todo y también en un negocio. Y esto no puede ser. Cada día hay que reinventerse, hay que aprender, hay que rectificar".

 

Reconoce el gran trabajo que se ha hecho en alta gastronomía en Baleares los últimos años pero tiene claro que para llegar al nivel de otras zonas como el País Vasco "aún nos queda mucho trabajo por delante. No tenemos que conformarnos. Lo hacemos bién. Si. Pero lo podemos hacer aún mejor".

 

No le faltan proyectos ni ganas a Tomeu que se ha planteado luchar contra la estacionalidad reabriendo el Taronja Negre de Sant Llorenç todo el año. A la hora de hablar de la ecotasa lo hace con prudencia en términos de diálogo y consenso a pesar de mostrarse reticente a que se establezcan nuevos impuestos.

 

Si queréis saber más de nuestra entrevista "De tú a tú" con Tomeu Caldentey estad atentos al video que publicaremos mañana.

Caldentey: "Una estrella Michelín no es un objetivo, es un pistoletazo de salida"