Hacer público el transporte sanitario terrestre le cuesta al Servicio Balear de Salud casi el doble de la factura del mismo servicio externalizado.
Concretamente, “mediante el convenio con empresas privadas, el coste mensual de la licitación ascendía 972.000 euros mensuales, un importe que incluía todos los gastos: personal, vehículos, combustible, electromedicina, fungibles, mantenimiento, etc.”, explica Javier Rodríguez, gerente de la Federación Nacional de Empresarios de Ambulancias (ANEA).
Desde el pasado 1 de abril, la gestión del transporte sanitario ha sido asumida por la empresa pública Gestió Sanitaria i Assitencial de les Illes Balears (Gesaib), y lo único que cambiado han sido los gastos. “Hasta el mes de abril, el servicio de transporte sanitario lo realizaban eficientemente empresas privadas coordinadas, supervisadas y, en caso necesario, inspeccionadas por el 061 Balear”, y el fuerte incremento del coste (casi el doble) lo deben asumir “todos los ciudadanos de esa comunidad, sin que haya supuesto ninguna mejora en la prestación del servicio, ni en el equipamiento de las ambulancias ni en personal (es igual que con las empresas privadas)”, advierte la patronal.
“Desde esta Federación ya se advirtió a la Consellería de Salud del importante aumento de costes que supondría hacer público el servicio de transporte sanitario y se le proponía un grupo de trabajo mixto que analizara las posibles mejoras y el incremento en la concertación privada que esto supondría, que se fijó en torno a un 20%, y nunca al doble del importe que se estaba licitando”, añade.
ANEA augura otro importante sobrecoste en los próximos meses, cuando “el personal demande subidas salariales para equipararse a la de los funcionarios, lo que puede suponer hasta un 40% de aumento (que se sumará a la ya abultada factura)”.
También en materia de personal, Javier Rodríguez apunta que “las empresas privadas son las que durante estos años han asumido la formación de los profesionales del transporte sanitario en beneficio de la atención a los ciudadanos, un esfuerzo del que ahora se está beneficiando la empresa pública”.
Por todo este cúmulo de factores ANEA resalta que, “desgraciadamente, nunca se nos hizo caso y se ha implementado un servicio público sin la experiencia y eficiencia de las empresas que lo venían realizando desde hace muchos años, y con los problemas que venimos denunciando desde hace semanas”.
En abril, ANEA denunció que la renovación de toda la flota de ambulancias de Baleares, por vehículos de 3.500 kilos ha colocado en situación irregular a muchos de los trabajadores (conductores y técnicos en emergencias sanitarias) por carecer del permiso tipo C1 necesario para conducir estos vehículos, “siendo conscientes los responsable de Gesaib de la necesidad de dicha autorización, no solo para los conductores, sino también para el técnico en funciones de ayudante o camillero, según marca el artículo 4, apartado b y c del RD. 836/2012 de 25 de mayo por el que se establecen las características técnicas, el equipamiento sanitario y la dotación de personal de los vehículos de transporte sanitario por carretera”, detallaba ANEA.
