La campaña de 2018 contra el instrusismo en el transporte en el aeropuerto de Palma ha concluido con 656 sanciones, trece veces más que la del año pasado, por valor de 300.948 euros, de las que solo una de ellas ha sido para un "taxi pirata" y 13 por captación irregular de clientes.
El conseller de Territorio, Energía y Movilidad, Marc Pons, ha presidido la Comisión para la Lucha contra el Intrusismo que ha hecho balance de la campaña que ha incluido controles en taxis, VTC (turismos con conductor) y transporte discrecional, y se ha realizado con la colaboración de la Guardia Civil de Tráfico y Aena, ha informado el departamento autonómico en un comunicado.
Una de las razones del incremento de las infracciones detectadas es que este año se ha realizado un control documental de las empresas sancionadas in situ, con lo que se han podido detectar muchas infracciones en cuestiones de contratación y facturación.
Otra novedad ha sido la presencia de inspectores de paisano para detectar la captación irregular de clientes en la zona de llegadas del aeropuerto.
En total se han realizado controles a 342 vehículos, lo que ha supuesto la apertura de 59 boletines de inspección. Además, a través de los requerimientos de documentación se ha abierto un total de 597 actas de infracción, hasta las 656 infracciones detectadas.
La cuantía de las sanciones impuestas ha llegado a 300.948 euros (53.951 en boletines de sanción, y 242.997 en actas). En 2017, se controlaron 412 vehículos y se impusieron 48 sanciones por valor de 79.580 euros.
Pons ha destacado el "incremento importantísimo" de la efectividad de la campaña, con un aumento muy considerable del número de sanciones impuestas.
Del total de sanciones impuestas este año, 618 corresponden a vehículos discrecionales, 22 a VTC, y 16 a taxis.
En el caso de los vehículos discrecionales, la cantidad tan elevada responde al control de documentación que se ha llevado a cabo, y la mayor parte son por irregularidades en anotaciones en el libro de ruta y la facturación.
De las infracciones detectadas in situ, 13 han sido por la captación irregular de clientes, cosa que manifiesta el buen funcionamiento de las actuaciones con inspectores de paisano.
Los agentes de incógnito han acreditado 14 infracciones en total: las 13 por captación ilegal de clientes y una por venta por plaza. Les corresponden 14.000 euros de multa.
En el caso de los VTC, de las 22 infracciones: 4 han sido por vehículos sin la pertinente autorización; 7 por vehículos deslocalizados sin acreditar el tiempo máximo de permanencia, 7 más por vehículos deslocalizados que superan el plazo máximo, 2 por vehículos que no exhibían el distintivo obligatorio, una para un conductor sin relación laboral y otra más por transporte de mercancías sin autorización.
Respecto a los taxis: 9 infracciones corresponden a taxis de Palma y 7 de la Part forana, y son sobre todo por incumplimiento tarifario, no rellenar libros de contratos o no exhibir tabla de precios. En uno de los casos ha sido por un vehículo sin autorización, estrictamente un "taxi pirata".
En la campaña se ha comprobado que las empresas de minibús que realizan captación no hacen anotaciones en el libro de ruta o no facturan correctamente los viajes, lo que ha dado lugar a actas por un total de 238.996 euros a 8 de estas empresas que se dedican a captar clientes en el aeropuerto sin contratación previa.
