El presidente y consejero delegado de Grifols, Víctor Grífols, dejará el cargo de Consejero Delegado en 2017 para dar paso a su hermano, Raimon Grifols Roura, y a su hijo, Víctor Grifols Deu, que asumirán el cargo de consejeros delegados solidarios, aunque se mantendrá como presidente de la compañía.
El grupo ha informado hoy a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) de la decisión adoptada el pasado día 10 por el Consejo de Administración de Grifols, que aceptó por unanimidad el plan de sucesión al frente de la compañía propuesto por Víctor Grifols Roura, que cumplirá 67 años en 2017.
Además de estos dos nuevos nombramientos, el plan de sucesión establece 2016 como período de transición para conseguir un relevo ordenado y planificado.
"Ha llegado el momento de ceder la responsabilidad ejecutiva de Grifols a una nueva generación muy bien preparada y capaz de dirigir la compañía hasta niveles tan altos como los logrados desde 1987 hasta hoy. Estoy tranquilo porque he depositado mi confianza en los mejores candidatos", ha señalado el presidente de la compañía.
El plan de sucesión establece asimismo el nombramiento de Víctor Grifols Deu como consejero ejecutivo en la próxima Junta General Ordinaria de Accionistas prevista para 2016, así como el de Thomas Glanzmann como vicepresidente no ejecutivo del Consejo de Administración a partir del 1 de enero de 2017.
El grupo sostiene que el relevo generacional previsto reitera el compromiso de la familia fundadora con la compañía, y la preparación profesional de los dos nuevos consejeros delegados permitirá, según Víctor Grifols, "enfocar y aceptar los retos del futuro con mayor objetividad de la que yo pudiera aplicar".
La compañía, que ha celebrado este año su 75 aniversario y tiene su sede central en Barcelona, está presente en más de un centenar de países y es líder en la producción de medicamentos biológicos derivados del plasma y en la obtención de plasma, con 150 centros de donación en EEUU.
