El Hotel Illa d'Or , del Port de Pollença, reabre sus puertas después del descanso invernal con una imagen renovada y con unas perspectivas fantásticas para la próxima temporada.
A partir del primer día de actividad el hotel registrará ni más ni menos que un 60% de ocupación para arrancar. Además, pasado el primer mes se rozará el lleno total con una media de más del 90% hasta finales de verano. El hotel ha programado su final de temporada para el 13 de noviembre.
La dirección del hotel ha presentado las renovadas instalaciones que han incluido un cambio importante en cuanto a actualización de la imagen en los espacios comunes y, sobre todo, en su restaurante "1929", que quiere abrirse aún más allá de los clientes propios del hotel con una cocina cuidada y de calidad.
Estas mejoras se complementarán con otra de las grandes apuestas, la mejora integral de la zona de Spa y Wellness, que pasará a ser un buque insignia en su gama de servicios a los clientes. Además se crea una nueva sala de conferencias.
El objetivo de este cuatro estrellas superior, según su director, Toni Corró, es "continuar apostando por elevar la calidad y la excelencia en nuestros servicios para conseguir hacer perfecta la experiencia de nuestros clientes".
Corró comenta que la mayor parte de su clientela es de procedencia británica y que existe un alto índice de fidelidad y de repetidores. Además en los últimos años se han disparado las reservas on line frente a los operadores tradicionales. De hecho internet ya supone el 40% del volumen de reservas.
El hotel tiene contratadas a 80 personas para cubrir los servicios de las 120 habitaciones con las que cuenta.
