El 19% de los consumidores españoles efectúa compras a través de internet al menos una vez a la semana, una cantidad menor a la de otros países como China o Reino Unido, según un estudio sobre comercio electrónico realizado por la consultora Price Waterhouse Coopers (PwC).
El informe "Total Retail 2016", publicado hoy, especifica que los españoles todavía realizan un uso "limitado y poco frecuente" de internet para realizar compras y siguen prefiriendo la tienda física.
La media mundial de consumidores que compran online como mínimo en una ocasión por semana es del 29%, con países como China (71%) o Reino Unido (45%) que superan por un amplio margen los datos extraídos de las entrevistas con consumidores españoles.
En cuanto a los consumidores que efectúan sus adquisiciones por internet como mínimo una vez al mes, mientras la media global se sitúa en el 65%, en España ese porcentaje es del 48%, muy por debajo del 94% de los chinos y el 81% de británicos o alemanes.
En España, los consumidores prefieren acudir a tiendas físicas tradicionales, ya que un 66% de ellos lo hace al menos una vez al mes y un 40%, a la semana.
El informe destaca la baja cantidad de compradores españoles que usan servicios de venta online a través de sus teléfonos inteligentes, un 7%, dato que contrasta con que España sea el país con mayor penetración de teléfonos inteligentes de Europa (81%).
Según PwC, la inseguridad y el miedo a que sus datos sean "hackeados" es el principal factor que detiene a los españoles a la hora de efectuar sus compras por internet.
Sin embargo, el precio de los productos y la sencillez y comodidad son las razones primordiales que dan los que sí se lanzan a estas compras online.
En cuanto a los productos preferidos por los consumidores españoles en sus adquisiciones por internet, destacan los libros, música, películas y videojuegos, seguidos de artículos de electrónica y ordenadores y, en tercer lugar, ropa y calzado.
Por el contrario, los menos requeridos por los españoles en sus compras online son los productos de alimentación, seguidos de joyas y relojes y muebles.
