El fabricante alemán de deportivos Porsche, una de las marcas del grupo Volkswagen, incrementó en 2015 el beneficio operativo un 25% frente a un año antes, hasta el récord de 3.400 millones de euros, pero se mostró cauteloso respecto a 2016.
Porsche informó hoy de que la facturación subió el año pasado también un 25%, hasta 21.500 millones de euros, en comparación con 2014. Las entregas crecieron en el mismo periodo un 19%, hasta 225.000 unidades.
El presidente de la junta directiva de Porsche, Oliver Blume, dijo al presentar el balance en Stuttgart-Zuffenhausen (oeste) que se trata de "resultados extraordinarios, incluso para los estándares de Porsche".
Asimismo, Blume destacó el éxito en los primeros meses de 2016, en los que incrementó las entregas un 14%, a más de 35.000 unidades, gracias al modelo todocamino deportivo Macan y al Cayenne. Pero Porsche también prevé impulsos del 911, de la nueva serie 718 Boxster y 718 Cayman, así como del Panamera.
No obstante, el director de Finanzas y Tecnología de la Información, Lutz Meschke, advirtió tener unas "expectativas exageradas".
Meschke recordó las inversiones de miles de millones en el primer modelo completamente eléctrico Mission E, que calificó "de un gran paso en el futuro de nuestra marca". Porsche no compensará estos gastos con ingresos por ventas de vehículos porque el Mission E será lanzado al mercado al final de la década, añadió Meschke.
Porsche espera que los ingresos crezcan ligeramente en el ejercicio fiscal 2016 y que los beneficios alcancen el mismo nivel que el pasado año, vaticinaba Meschke.
Blume añadió: "nuestro objetivo primordial no es conseguir unos números de ventas altos. Estos son la consecuencia lógica de nuestra estrategia corporativa y una expresión de la atractiva gama de producto".
La rentabilidad antes de impuestos fue del 16% en 2015, lo que significa que Porsche continúa siendo el fabricante de automóviles más rentable del mundo, a pesar de las grandes inversiones en sus centros de producción y en los proyectos de desarrollo.
Porsche añadió que realiza enormes inversiones en su futuro. En el año fiscal 2015, las partidas dedicadas a inversión y desarrollo aumentaron hasta los 2.150 millones de euros.
