Las denominaciones de origen (DO) Binissalem y Pla i Llevant y los vinos de la tierra de las Illes Balears, Serra de Tramuntana, Mallorca, Eivissa, Formentera e Isla de Menorca produjeron 54.458,58 hectolitros en 2015, un 11,88% más que el año anterior.
No obstante, la producción de las denominaciones de origen descendió un 3%, y el vino de la Tierra de Eivissa, un 8%, detalla en una nota de prensa la Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca.
Destaca, sin embargo, el incremento de un 340% de la producción del vino de la Serra de Tramuntana, lo que permitirá la recuperación este año del volumen de comercialización de los vinos de calidad de las Islas Baleares, que en 2015 descendió por primera vez un 5,77%. Esta merma se explica, principalmente, por la falta de existencia del producto, dado que en 2014 la producción de vino se redujo un 5,88%.
El vino tinto fue el más comercializado en 2015, con 25.892,51 hl, seguido del blanco (13.272,30 hl) y del rosado (6.257,40 hl).
En relación a la distribución del volumen total de comercialización de los vinos por denominaciones, el de la Tierra de Mallorca ocupó un 36%, seguido del DO Binissalem, con un 34,98%, y del DO Pla i Llevant, un 23,34%.
El resto se repartió entre los vinos de la tierra Isla de Menorca (2,47%), de Eivissa (2,43%), de Formentera (0,37%), de las Illes Baleares (0,2%) y de la Serra de Tramuntana (0,18%).
La mayor parte de estos vinos se consumieron en Baleares, donde se comercializó un 80% del producto, mientras que a la Unión Europea llegó el 14%, a España el 1,60% y a terceros países el 4,44%.
Entre las exportaciones en el ámbito europeo destacó el mercado alemán, con un 81%, mientras que el principal consumidor fuera del ámbito comunitario ha sido Suiza, con un 76,65%.
Los vinos de calidad de las Islas Baleares llegan hasta los Estados Unidos, Japón, China y Panamá.
En 2015 se recuperó también la superficie de viña en producción, un 12,8% respecto a 2014, y se situó en 1.623,35 hectáreas, en especial por el aumento de la destinada al Vino de la Tierra de Mallorca -que pasó de 573 hectáreas a 780- y que compensó las disminución de superficie de producción de la DO Binissalem, que en 2015 fue de 362,37 hectáreas (un 23,46% menos que el año anterior).
Respecto al valor económico del vino comercializado, en 2015 representó 29.643.822 euros, un 0,92% menos que en 2014, de los cuales 12,7 millones pertenecen al Vino de la Tierra de Mallorca, 9,5 a la DO Binissalem y 5,3 millones a la DO Pla i Llevant.
Los datos de cada vino se pueden consultar en la sección de estadística de la web illesbalearsqualitat.cat.
