La confianza de los consumidores cayó en marzo por tercer mes consecutivo, hasta los 92,6 puntos (2,6 puntos menos que en febrero) tanto por la peor percepción de la situación actual como por las menores expectativas, según el Indicador de Confianza del Consumidor (ICC), publicado hoy por el CIS.
El Centro de Investigaciones Sociológicas detalla que el índice se vuelve a situar por debajo de los valores obtenidos en los últimos catorce meses.
El indicador de situación actual baja hasta 85,6, frente a los 87,7 de febrero, mientras que el indicador de expectativas se reduce a 99,6, cuando el mes pasado era de 102,7.
En relación a marzo del pasado año, la evolución es claramente negativa, ya que el descenso alcanza los 7,8 puntos, con pérdidas muy superiores en las expectativas (-14,1 puntos), frente al ligero retroceso en términos absolutos para la valoración de la situación actual, que desciende 1,5 puntos.
En términos porcentuales, el perfil de la evolución registrada es muy similar: el ICC baja un 8,5% como resultado de un descenso del 1,8% en la valoración de la situación actual y una pérdida del 14,2% en las expectativas.
La evolución trimestral ofrece una evolución muy negativa que ahonda la ligera caída experimentada en el último trimestre de 2015, según el CIS (pierde un 8% respecto al registrado en el trimestre anterior).
En lo que se refiere en concreto al índice de valoración de la situación actual -que se situó en marzo en 85,6 puntos- su evolución negativa es el resultado de un comportamiento muy heterogéneo de sus tres componentes.
La valoración de la evolución general de la economía es notablemente negativa y pierde 5,4 puntos en este último mes, la percepción de las posibilidades del mercado de trabajo retroceden de forma algo más moderada (-3,6 puntos), mientras que la valoración de la situación de los hogares vuelve a aparecer como el componente más positivo y ofrece un avance de 2,6 puntos en los últimos treinta días.
En relación a los datos de marzo de 2015, la evolución da un perfil muy similar, ya que baja 8,7 puntos la valoración de la situación económica del país, las opciones que da el mercado de trabajo se valoran 2,3 puntos por debajo y sin embargo la situación en los hogares mejora en 6,5 puntos desde entonces.
Por su parte, las expectativas respecto a la situación de los hogares descienden tan solo 0,5 puntos frente al mes precedente, mientras que las referidas al mercado de trabajo se recortan en 4,4 puntos y las expectativas sobre la situación económica presentan un descenso prácticamente igual, 4,6 puntos.
En términos interanuales los datos también ofrecen una evolución muy desfavorable, ya que desde marzo del pasado año las expectativas respecto a la situación económica del país se recortan en 19,2 puntos y las referidas al mercado de trabajo descienden 20,1 puntos, mientras que las de los hogares retroceden únicamente en 3,1 puntos.
En porcentaje, las expectativas respecto de la situación económica general se han recortado en el último año un 16,6%; las referidas al empleo, un 17,2%, y las de los hogares, un 2,9%.
En términos mensuales, se observa un descenso de las expectativas de ahorro (-1,1 puntos) y de consumo de bienes duraderos (-2,1 puntos), y un descenso de los temores de subidas de tipo de interés (-3,6 puntos).
Por último, vuelven a aumentar en 2 puntos los temores a un incremento futuro de los precios.
