El 95% de la planta hotelera de Mallorca no cumple con la actual legislación de seguridad en lo referente a parques acuáticos, parques infantiles y recintos deportivos.
La actual normativa legal obliga a las empresas privadas y administraciones públicas a someterse a unas inspecciones para conseguir las actuales certificaciones de seguridad bajo el sello de UNE.
Esta norma de obligado cumplimiento está siendo ignorada sistemmáticamente y en la mayoría de casos por simple desconocimiento.
Así se advierte desde la consultora Ases XXI que se dedica a realizar este tipo de revisiones y al otorgamiento de los certificados. En estos momentos solo cuatro empresas en toda España estan acreditadas para realizar este tipo de inspecciones y en Baleares sólamente existe una.
José Morell, responsable de la delegación en Baleares de Ases XXI, explica que en estos momentos sólamente 8 hoteles de Mallorca han pasado las inspecciones. "Desafortunadamente los responsables de los hoteles no son conscientes de la importancia de estas revisiones. Lo que hacen los hoteles es comprar estos aparatos a los precios más competitivos, normalmente en China. A pesar de que se trata de elementos homologados después lo monta el personal de mantenimiento de los hoteles pero muchas veces no se sigue la normativa sobre todo en lo referente a las distancias de seguridad para evitar caidas".
Morell comenta que lo ideal sería que los mismos turoperadores exigiesen a los hoteles estas certificaciones a la hora de negociar y comprar paquetes turísticos como requisito insidensable. De esta manera las empresas se concienciarian de verdad sobre la importancia de estas inspecciones.
El coste de una inspección puede ir de los 250 a los 600 euros y a partir de ella se detectan y subsanan todas las deficiencias. Desde Ases XXI se ha indicado que en los casos de accidentes, si las instalaciones no cumplen con estos requisitos, las compañias aseguradoras no se hacen responsables de las responsabilidades que se deriven.
