El año pasado la entidad mallorquina invirtió un millón y medio de euros en 70 proyectos de ayuda humanitaria, en 20 países diferentes y llegando a más de 200.000 beneficiarios.
El ejercicio de 2015 empezó con una renovación en los órganos de gobierno de la Fundación, donde se nombraron 4 nuevos patronos (externos a la familia) para ganar mayor cotas de eficiencia, independencia y transparencia.
De las 70 actuaciones realizadas a lo largo del año, 23 fueron en materia de educación, 16 en salud, 10 en medio ambiente y 4 en microcréditos, entre otros, según cifras de la memoria publicada recientemente por la entidad.
Cabe destacar la puesta en marcha en 2015 del proyecto FARMASOL (Farmacias Solidarias en África). Este programa, gestionado directamente por la Fundación a través de la farmacéutica Amelia Fornés, puso en marcha 5 farmacias solidarias en el continente africano con el objetivo de facilitar el acceso a las medicinas de las poblaciones más desfavorecidas. Gracias a ellas, se lograron mejorar las condiciones de salud de más de 50.000 personas.
Entre los proyectos destacan también las becas educativas a 200 niñas en Guatemala, o la construcción de pozos de agua potable en alguno de los puntos más pobres de Burkina Faso.
Finalmente la memoria del 2015 informa que la Fundación Barceló lideró el año pasado el ranking de fundaciones familiares más trasparentes de España, según el informe publicado por la Fundación Compromiso y Trasparencia.
