UGT y CCOO han vuelto hoy a criticar que la reforma de la Formación Profesional, que ha sido aprobada en Consejo de Ministros, excluya a los agentes sociales del órgano que controla las ayudas, al considerar que termina "con el consenso alcanzado durante años".
En un comunicado difundido hoy, el secretario de Formación de UGT, Sebastián Pacheco, ha indicado que la exclusión de los interlocutores sociales del órgano que controla las ayudas del sistema de formación para el empleo ha "echado por tierra" un clima de diálogo, consenso, trabajo y acuerdos en materia de formación que "se había consolidado durante años".
Asimismo, Pacheco ha subrayado que esta decisión provocará la desaparición del proceso de control y evaluación que los agentes sociales hacían de las de ayudas, lo que impedirá que se garantice su uso correcto.
Además ha señalado que el sindicato recurrirá esta decisión y emprenderá las acciones legales oportunas porque "se trata de un planteamiento antisocial y antisindical" que supone, además, un incumplimiento directo de diferentes acuerdos.
Por su parte, CCOO ha afirmado que esta exclusión, que considera "indefendible" en términos políticos, no puede tampoco explicarse en términos legales.
En ese sentido, ha recordado que la Audiencia Nacional y el Tribunal Constitucional han indicado en diferentes sentencias que la presencia de empresarios y sindicatos en este órgano "es ajustada a derecho".
También ha incidido en que la ley de formación para el empleo ordena la participación de los agentes sociales en la gobernanza del sistema y, en particular, en el diseño, planificación, control, seguimiento y evaluación de la oferta formativa, en especial de la dirigida a los trabajadores ocupados.
El sindicato también ha señalado que el Gobierno tiene como "único objetivo que no haya testigos, controles, ni seguimiento real" de la formación para el empleo que se financia con la cuota de trabajadores y empresas.
