sábado. 18.05.2024

El efecto legal de Brexit para las empresas baleares en materia digital

En julio de 2016, la entonces primera ministra Theresa May dijo que “Brexit significa Brexit“. Más de tres años después no tenemos todavía claro qué significa Brexit, de hecho no sabemos ni tan siquiera cuándo y cómo se va a producir la salida del Reino Unido de la Unión Europea (si es que finalmente se produce). Sea como sea, la próxima fecha que debemos tener muy en cuenta, y que puede ser la definitiva, es el próximo 31 de octubre de 2019.

 

Ese día finaliza la prórroga que la Unión Europea concedió al Reino Unido tras fracasar la primera fecha de salida, el pasado 29 de marzo de 2019. En la actualidad no sabemos si esa fecha se respetará o volverá a ser prorrogada hasta 2020. De hecho, no sabemos si la salida del Reino Unido se producirá con o sin acuerdo, algo legalmente muy importante.

 

Lo que sí sabemos es que si el Reino Unido abandona la Unión Europea sin acuerdo, el llamado Brexit duro, entraremos en uno de los escenarios jurídicamente más complejos que ha visto Europa en las últimas décadas. O lo que es lo mismo, si el Reino Unido finalmente abandona la Unión Europea lo mejor es que lo haga de acuerdo a lo establecido en el pacto firmado en su momento. De lo contrario, nos esperan muchas curvas jurídicas.

 

Centrándonos ahora en esa inseguridad jurídica, y con especial atención en las cuestiones jurídico-tecnológicas, ¿cómo puede afectar el Brexit a las empresas de Baleares en materia digital?

 

Son muchas las materias y las áreas digitales en las que pueden verse afectadas legalmente las empresas de Baleares por el efecto Brexit, en especial si es un Brexit duro. Enunciaremos brevemente las diferentes cuestiones y luego nos centraremos con algo más de detalle en algunas de ellas.

 

Dicho esto, el Brexit afectará en materia digital en: comercio electrónico, radiodifusión y telecomunicaciones, roaming y neutralidad de la red, licencias de emisión, portabilidad transfronteriza, propiedad industrial, marcas, patentes y diseños industriales, propiedad intelectual y derechos de autor, derechos sobre las bases de datos, obras huérfanas sin autor conocido, protección de datos de carácter personal y transferencia de datos entre el Reino Unido y la Unión Europea, la gestión de dominios web europeos o .EU, el acceso al mercado único digital, las plataformas de intercambio de criptomonedas o el outsorcing de trabajo y empleados en materias tecnológicas.

 

De entre todas esas materias vamos a destacar tres, comenzando por la protección de datos de carácter personal. Desde el 25 de mayo de 2018, el Reglamento General de Protección de Datos (en adelante RGPD) es la norma que en la UE regula el uso de los datos personales y su protección jurídica como un derecho fundamental. El Brexit sin acuerdo puede generar más de una duda en cuanto al RGPD y su aplicación en transferencias de datos, la comunicación de brechas de seguridad, el contacto con autoridades de control, la necesidad de representantes locales en otros territorios o la adopción de normas corporativas vinculantes.

 

Teniendo en consideración que las empresas de Baleares gestionan una gran cantidad de información personal de ciudadanos residentes en el Reino Unido, un posible Brexit duro tendría efectos en la gestión de esa información personal. Por ejemplo, a la hora de hacer una campaña publicitaria a través de correo electrónico o gestionar un programa de fidelización en hoteles.

 

En segundo lugar, la empresas de Baleares con negocios en el Reino Unido deben valorar la gestión de sus marcas y nombres comerciales. Si bien el gobierno británico ha manifestado que garantizará los derechos de los titulares de las marcas y diseños comunitarios ya registrados (de modo que una marca comunitaria no requiera volver a ser registrada en el Reino Unido una vez se produzca el Brexit), se deberá gestionar la concesión de ese nuevo derecho equivalente.

 

Por último, y en tercer lugar, debemos también destacar la importancia del outsorcing o la contratación de empleados en el Reino Unido para la realización de tareas como por ejemplo el desarrollo informático. En ese caso, y en función del tipo de salida del Reino Unido, podrían verse afectadas cuestiones relativas al mantenimiento de los derechos de los trabajadores en caso de traspasos de empresas o de centros de actividad.

 

En definitiva, el impacto jurídico que Brexit tendrá en el medio - largo plazo será muy importante. Ahora bien, si la salida del Reino Unido se produce sin acuerdo, ese impacto será incluso mayor y además en el corto plazo. Por tanto, las próximas semanas pueden ser muy útiles a efectos de prepararse de cara a lo mucho que está en camino.

El efecto legal de Brexit para las empresas baleares en materia digital