martes. 24.09.2024

El sector hostelero en Baleares cerró 2018 con 12.727 establecimientos, que emplearon a alrededor de 109.000 trabajadores, 56.525 correspondientes a los servicios de alojamiento y 52.200 a restauración.

 

Su facturación supone 9.363 millones de euros, y es la comunidad autónoma en la que el sector tiene una mayor aportación a la riqueza regional, con un 21,3%.

 

Son algunas de las cifras que se recogen en el Anuario de la Hostelería de España 2019, presentado por Hosteleria de España en la sede madrileña de Mahou-San Miguel con datos estadísticos del sector referentes a 2018, incluyendo sus dos ramas de actividad: restauración y alojamiento.

 

En el análisis que ofrece este informe en relación a las Islas Baleares, en 2018 el sector evolucionó de forma favorable, aumentando los principales indicadores a mayor ritmo que el año anterior.

 

El número de establecimientos en 2018 siguió creciendo respecto a 2017 tanto en la rama de restauración como el la del alojamiento, con más intensidad en esta última (2,4% y 9,5%, respectivamente). Únicamente los bares siguen situando su censo por debajo de las cifras de 2010 (-10.5%).

 

El empleo también aumentó a mayor ritmo, debido al impulso en las actividades de restauración que evolucionaron de forma positiva después de dos años consecutivos de descensos. En el alojamiento tuvo lugar el mismo incremento porcentual que en restauración (6,5%), aunque en este caso, el aumento fue más suave que el del año anterior: 11,6%.

 

Por su parte, los precios moderaron el crecimiento (2,1%) en las dos ramas de actividad, de forma más acusada en el alojamiento (2,7%), cuyo aumento se sitúa por debajo de la media nacional (3,2%).

 

El conjunto de la hostelería española volvió a superar el año pasado los 300.000 establecimientos (314.311 registrados), los cuales emplearon a 1,7 millones de trabajadores. Este sector cerró el año con una facturación de 123.612 millones de euros, lo que representa un 6,2% del PIB nacional.

Entre las conclusiones de este informe destaca que la hostelería es una de las ramas productivas de la estructura de la economía española con un importante peso en el PIB, el cual ha conseguido conservar a lo largo de los años.

 

Según las revisiones de la contabilidad nacional del INE, la aportación de la hostelería a la economía española en 2018 se sitúa en el 6,2%, del cual un 4,7% procede de los servicios de restauración y un 1,5% del alojamiento. A pesar del crecimiento en la facturación, esto supone una bajada en peso porcentual con respecto al 7,1% que aportaba al PIB en 2017, debido a la inclusión de nuevas actividades en la medición de 2018, como la economía sumergida.

 

El sector hostelero ha experimentado un crecimiento más moderado que el del año anterior, continuando con la tendencia de 2017, aunque la evolución se ha mantenido en positivo. Así, el conjunto de la hostelería facturó 123.612 millones de euros, un 3,1% más que el curso precedente.

 

Por su parte, el empleo ha vuelto a batir récord, alcanzando los 1,7 millones de trabajadores contratados en hostelería, esto es 71.000 más que en 2017. El máximo de empleo se alcanzó en los meses de mayor afluencia turística (julio y agosto), superando por primera vez la cifra de 1,8 millones de trabajadores.

La hostelería de Baleares factura más de 9.300M€ y genera el 21,3% de la riqueza