domingo. 29.09.2024

 

El Ayuntamiento de Palma quiere recuperar la reivindicación de conseguir la declaración de la ciudad como Patrimonio de la Humanidad. Para ello va a trazar una estrategia nueva que implica unirse con las ciudades francesas de Perpiñan y Colliure en una candidatura conjunta.

 

Así se ha puesto hoy sobre la mesa en la reunión que ha mantenido el alcalde de Palma, José Hila, con representantes del Ayuntamiento de Perpiñán . El objetivo del encuentro ha sido poner en común la posibilidad de unir esfuerzos entre las tres ciudades.

 

De este modo, lo que se hará ahora es elaborar un documento conjunto entre las tres administraciones públicas que luego se propondrá al resto de miembros del consistorio.


El Ayuntamiento de Perpiñán ha sido quien ha trasladado al consistorio palmesano la posibilidad de trabajar por una propuesta de candidatura conjunta.

 

A la reunión ha asistido, además del alcalde, el concejal de Cultura, Patrimonio, Memoria Histórica y Política Lingüística, Miquel Perelló, y la directora general de Cultura, Francisca Niell.

 

Por parte del Ayuntamiento de Perpiñán, han asistido el teniente de alcalde de asuntos catalanes, cooperación entre fronteras y administración, Brice Lafontaine, y el responsable de gestión del patrimonio, del seguimiento de las adquisiciones del patrimonio histórico y encargado de la clasificación de la UNESCO, Yves Guizard. También acudieron técnicos de la ciudad francesa.

 

Cabe recordar que el pasado mes de septiembre el pleno del Ayuntamiento de Palma aprobó por unanimidad una moción presentada por el PP para pedir que se siguiera adelante con los trabajos hechos hasta el momento para conseguir esta calificación por parte de la UNESCO.

 

La pasada legislatura se presentó un informe avalado por diferentes entidades, entre ellas el colegio de arquitectos, ARCA o el Consell de Mallorca que refrendaba esta candidatura presentando como gran baza la imagen de Palma vista desde el mar, una estampa única en paisaje y patrimonio.

 

La declaración de Patrimonio de la Humanidad De entrada, representaría muchos beneficios para la ciudad. En primer lugar Palma ganaría aún mayor protección para su patrimonio. La UNESCO marca un grado de protección muy elevado para el patrimonio seleccionado y obliga a tomar medidas legislativas para garantizar esta protección más allá del gobierno que haya en cada momento.

 

Existen beneficios económicos ya que la UNESCO habilita dinero del Fondo de Patrimonio Mundial para ayudar a mantener estos edificios o espacios. Estas ayudas van desde dinero directo para obras hasta asistencia técnica en conservación o gestión de monumentos.

 

​Otro tipo de beneficios económicos son los derivados de la promoción en si. El mero hecho de tramitar la candidatura tiene una repercusión internacional positiva para la imagen de cualquier ciudad.

 

Esto se transforma en prestigio y posicionamiento turístico. Y a la larga en entrada de dinero para los hoteles, comercios y administraciones públicas.​ Cualquier ciudad que se declare Patrimonio de la Humanidad incrementa de forma importante el número de turistas que la visitan.

 

​En el caso de Palma conseguir este título supondría un espaldarazo a la lucha por conseguir un turismo alternativo al tradicional, un turismo que busca incentivos como la cultura, el patrimonio, la gastronomía o también las compras. Se trata de un turismo de mayor poder adquisitivo en general y por lo tanto que deja un gasto mucho mayor en la ciudad.

Palma quiere ser reconocida como Patrimonio de la Humanidad