La patronal Pimem ha insistido en la necesidad de diversificar los productos turísticos más allá del de sol y playa en Baleares y dejar atrás la masificación, porque el cliente que surge en tiempos de pandemia "quiere sentirse seguro".
El presidente de la patronal, Jordi Mora, y el miembro de la ejecutiva de Pimem y CEO de la consultoría Processing Smart, Luís Sánchez, han presentado el estudio sobre las tendencias de reservas turísticas para este verano y el modelo de oferta, realizado a partir de los datos aportados por cuatro empresas turísticas de las islas.
El experto ha señalado que este verano iba a ser flojo respecto a otros años pero que las reservas hoteleras a finales de febrero visualizaban un aumento a partir de mediados de mayo y una mejora de la tendencia a partir de septiembre.
Sánchez considera que esta situación podría mejorar después de que el Gobierno alemán anunciara la semana pasada la supresión de la cuarentena y las PCR a la vuelta de los turistas que viajen a las islas, y el efecto del proceso de vacunación en Reino Unido.
Ha detallado que el número de reservas a última hora es muy alto, de acuerdo a las noticias de tranquilidad que van surgiendo y que el nivel de interés de compra por el volumen de búsquedas a través de estas páginas webs es alto: "La gente tiene ganas de viajar".
Una de las plataformas tecnológicas baleares que han participado en este estudio muestra que, hasta el mes pasado, había recibido el 40% de la reservas de julio de 2021 sobre la recibidas en el mismo mes de 2020 y que el ratio de anticipación del nuevo consumidor es mucho menor.
Otra de las empresas turísticas sostiene que las reservas hoteleras están un 61% por debajo de las reservas habituales en estas fechas, pero prevé una reacción de los mercados por la relajación de las nuevas restricciones.
En este proceso de recuperación, Baleares se sitúa por detrás de otros destinos turísticos claves como Canarias, Grecia y Turquía. Uno de los puntos importantes para consolidar esta recuperación será la apuesta por el mercado local y nacional, ya que en los últimos años "nos hemos centrado mucho en el internacional", según Sánchez.
Además, ha incidido en que la comunicación directa con el cliente recurrente es "clave" para seguir manteniendo su interés y por eso ha animado a las empresas hoteleras a generar acciones de promoción junto a contenido informativo o emocional, así como más flexibilidad y agilidad en la gestión de cambios, de acuerdo a la evolución de la pandemia.
El informe también sugiere que el nuevo cliente nacional y local apuesta, sobre todo, por las escapadas de fin de semana en cualquier tipo de alojamiento y que demanda productos y servicios que no estén masificados, más seguros y personalizados.
También ha hecho hincapié en la necesidad de complementar el turismo de sol y playa con "otras joyas" que ofrece el archipiélago, como el turismo cultural, el gastronómico, enológico, deportivo y de montaña, entre otros puntos.
Por su parte, el presidente de Pimem, Jordi Mora, ha reclamado mayor celeridad en el proceso de vacunación contra la covid-19 para atraer a mercados emisores este verano tras con un arranque en Semana Santa "suave".
