El sector turístico británico celebró aliviado la decisión del Gobierno de Boris Johnson de suprimir la cuarentena para viajeros con la pauta completa de vacunación que lleguen a Inglaterra desde los Estados Unidos o países de la Unión Europea, salvo Francia, sujeta a mayores restricciones por el avance de la variante beta.
La medida, anunciada este miércoles por el ministro de Transporte británico, Grant Shapps, entrará en vigor a partir del próximo 2 agosto y se aplicará a todos los vacunados con preparados aprobados por la Administración de Medicamentos y Alimentos estadounidense (FDA) y la Agencia Europea del Medicamento (EMA).
UKinbound, asociación representante del turismo receptor en el Reino Unido, aplaudió el "paso adelante" que supone la supresión de la cuarentena para el sector, que emplea a medio millón de personas y aporta a la economía 28.000 millones de libras (32.800 millones de euros), e instó al Ejecutivo a levantar el resto de restricciones en las fronteras.
Por su parte, John Holland-Kaye, director ejecutivo del aeropuerto londinense de Heathrow, uno de los principales en Europa, aseguró que la medida ayudará a "reunir a familiares y amigos" y a generar "miles de millones" en ingresos para el sector turístico británico.
Heathrow, que acumula pérdidas de 2.900 millones de libras (3.400 millones de euros) por la crisis del coronavirus, ha visto su volumen de viajeros reducido a mínimos históricos desde el inicio de la pandemia, con solo cuatro millones de usuarios en la primera mitad de 2021, una cifra que en 2019 alcanzaba en 18 días.
El levantamiento de la cuarentena, que de momento solo se aplica a las llegadas a Inglaterra (Escocia, Gales e Irlanda del Norte tienen sus propias competencias), supone también una bocanada de aire fresco para las aerolíneas, que afrontan su segundo verano de limitaciones en los viajes internacionales.
La medida dará a la economía "el impulso vital que tanto necesita", según el presidente de British Airways, Sean Doyle, quien urge al Gobierno británico a retirar el resto de restricciones vigentes, como las pruebas PCR, para que los clientes vuelvan a reservar sus vacaciones con confianza.
