El Ayuntamiento de Palma ha aprobado este lunes un nuevo decreto que permitirá a las terrazas de bares y restaurantes de la ciudad seguir ocupando plazas de aparcamiento hasta el próximo 30 de septiembre, desde las 8 hasta las 23 horas.
El concejal de Participación Ciudadana y Gobierno Interior en Cort, Alberto Jarabo, ha explicado en una rueda de prensa que el objetivo del consistorio es favorecer la reactivación de los establecimientos hosteleros del municipio, atendiendo a las restricciones desde el inicio de la pandemia.
El documento supone una prórroga del decreto municipal aprobado a finales del pasado diciembre, que permite extender la actividad de las terrazas de bares y restaurantes de Palma a las zonas de aparcamiento de vehículos.
Jarabo ha señalado que esta medida excepcional no se aplicará en espacios considerados zonas de especial protección acústica en Palma, como las áreas de La Lonja o el barrio de Sa Gerreria.
El responsable municipal ha recordado que, hasta el 30 de septiembre, las terrazas de estos establecimientos podrán ocupar el espacio que esté justo delante del local, así como su prolongación vertical de la fachada sin atravesar el eje de la calle.
También ha subrayado que los hosteleros no pueden ocupar las plazas de aparcamiento reservadas para personas con movilidad reducida, para coches eléctricos o paradas de bus y taxi.
En cuanto a aquellas medidas calificadas de "superexcepcionales" en el anterior decreto (ligadas a la restricción de la apertura del interior de locales de la restauración), Cort dará continuidad a la autorización otorgada a las terrazas para ocupar los viales, siempre que se pueda garantizar una zona de paso de dos metros y medio para los peatones.
Se podrá autorizar también la ocupación de plazas de aparcamiento para instalar terrazas, siempre que se corresponda a la prolongación de la fachada del establecimiento, y con una superficie máxima de 16 metros cuadrados, dejando un mínimo de dos metros y medio para los peatones.
Además, los elementos de delimitación de ocupación tendrán que ser fáciles de quitar, quedando prohibido su anclaje al pavimento, y se mantendrán los criterios estéticos y de seguridad establecidos en el anterior decreto.
